Hace poco decía que era muy bueno que en los medios argentinos habían comenzado a tratarse con madurez y valentía el debate acerca del futuro del trabajo. Bueno, hoy se publica en Clarín una nota que es del manual de las sonzeras en esta materia. Un tecno-optimismo sin fundamento cuya única utilidad es tranquilizar adónde no hay ningún dato tranquilizador.
Se trata de la nota titulada “El mito del robot destructor de puestos de trabajo” publicada en el suplemento Economía de Clarín. La nota es firmada por Victoria Giarrizzo, economista del Movimiento por los Valores, el Bienestar y el Desarrollo Argentino.
La nota dedica la primera mitad de su extensión -para ser precisos, el 53% de la misma- para relatar que la eliminación de procesos productivos y administrativos repetitivos hará que se elimine la causa que genera aburrimiento y poca satisfacción en los trabajadores. Algo perfectamente previsible y repetido hasta el cansancio para dar la bienvenida a los procesos automatizados y la inteligencia artificial. Una gigantesca obviedad.
La segunda mitad, procura responder a la pregunta “¿qué hacemos con los empleos que desplaza la tecnología?”. Esta es, sin ninguna duda, la única cuestión que debe ser respondida en esta materia y para la cual no hay respuesta cierta, sólo incertidumbre y pronósticos sombríos. Sin embargo, para la economista autora de la nota basta con decir que “así como la tecnología destruye empleos rutinarios, se crean un sinfín de trabajos más interesantes, en diseño tecnológico, programación, innovación, o culturales”. En fin, el mantra tranquilizador que se ha venido repitiendo desde hace décadas. Sin ninguna cifra, estadística o tendencia que permita considerar que esa respuesta/deseo tenga chances de concretarse.
No conduce a ningún lado ese tipo de optimismo sin fundamento. Lo que se necesita es que haya profesionales, organizaciones de trabajadores y dirigentes políticos capaces de enfrentar el problema con honestidad intelectual y con sinceridad. No hace falta apelar al auto-engaño ni llevar una falsa tranquilidad a quienes tienen la responsabilidad de ser previsores en el diseño de las políticas de desarrollo y empleo.
Cali
The Robots – Kraftwerk (nueva versión, 2013)
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